Cómo hacer Falafel casero, Receta original
El falafel es un plato de origen árabe y Oriente medio que consiste en la elaboración de una masa triturando habas o garbanzos hidratados en agua con cebolla, ajo y diversas especias. Después se le da forma de bola o croqueta y se fríen en abundante aceite. Normalmente se acompaña de salsa de yogur y pan de pita.
En los últimos años se ha extendido la receta de falafel gracias a que es una comida apta para veganos y para celiacos, además de por ser muy nutritiva y saludable. De hecho, puede ser una gran manera de comer legumbres para todos aquellos que no las toleran muy bien.
Su gran peculiaridad es que no hay que cocer las habas o los garbanzos, solamente hay que dejarlos a remojo unas 24 horas para que se ablanden, por lo que el proceso es aún más sencillo.
Origen del falafel
El falafel, tanto la palabra en sí como la receta, tiene un origen árabe y significa pimiento, pero no se conoce su procedencia exacta.
En Oriente Medio preparan el falafel con habas, garbanzos o una combinación de ambos ingredientes. En Egipto se prepara solamente con habas y se llama ta’miyya, pero cada vez es más común su elaboración únicamente con garbanzos. Es también un plato muy tipo de la gastronomía marroquí y turca.
La receta original de falafel la componen estas legumbres ablandadas y trituradas con ajo y cilantro. Se forman bolas achatadas y se fríen en abundante aceite. Pero como en todo en la gastronomía, hay tantas variantes casi como personas que lo elaboran.
Ingredientes falafel de garbanzos:
- 300g de garbanzos hidratados en agua durante, al menos, 24 horas
- 120g de cebolla
- 1 diente de ajo pelado
- Cilantro y perejil fresco al gusto
- Sal y pimienta molida
- Comino molido
- Levadura química
- Aceite de girasol para freír
- Harina de garbanzo
Cómo preparar el falafel de garbanzos
El primer paso y el más importante para hacer el falafel de garbanzos casero es poner a remojo los garbanzos durante al menos 24 horas. Recordamos que los garbanzos hay que ponerlos a remojo con agua caliente al principio, luego se quedará fría pero no pasa nada.
Tras ese tiempo, se escurren muy bien los garbanzos y se ponen en un robot de cocina que triture bien junto con la cebolla, el ajo, el perejil, el cilantro, la sal y la pimienta. En este momento se pueden añadir especias al gusto tan típicas en la comida árabe, nosotros recomendamos el comino.
Cuando obtengamos una masa fina, se añade un poco de levadura química y, si ha quedado muy blanda, un poco de harina de garbanzo (o pan rallado en su lugar).
La masa tendremos que dejarla reposar en la nevera una media hora para coger textura, pero la puedes dejar más tiempo.
El último paso es formar las bolitas achatadas y freírlas en el aceite. Se pueden rebozar ligeramente en la harina de garbanzo para que queden más crujientes.
Con qué acompañar el falafel: salsa de yogur
El falafel es un plato que se puede comer como entrante solo, sin más, pero tradicionalmente se come dentro de pan de pita y acompañado por una rica salsa de yogur.
Solo se necesita un yogur natural sin azúcar (griego a ser posible por ser más cremoso), medio ajo picado y el zumo de medio limón. Basta con mezclar los ingredientes, aunque se pueden triturar si se prefiere una textura más fina.
¡A disfrutar con esta receta de falafel fácil de preparar!